Antes de nada, hablemos de vuestro Congreso FECORA
En él vais a juntar a jóvenes estudiantes de vuestros ciclos formativos de toda España. Ojo, es el congreso Nacional, algo para lo que se llevan preparando bastante tiempo y para el que han tenido que superar un congreso previo en su comunidad de origen.
No es algo que se improvise. 3 representantes de cada proyecto tendrán que subirse al escenario y exponer el trabajo e investigación realizado. Una ponencia que refleje los frutos del trabajo en equipo para llevar a cabo la investigación relacionada con algún tema de su Familia Profesional.
Un motivo para poner en juego los valores éticos y morales que han aprendido a lo largo de su etapa formativa en vuestros centros educativos.
Habrá nervios y mucho entusiasmo por compartir lo aprendido.
Ya tenéis muchas cosas avanzadas:
Unas fechas.
Ponentes de alto nivel como son los propios protagonistas del congreso.
Experiencia de anteriores congresos.
…
Pero quizás haya algo que puede hacer más enriquecedora la vivencia de los asistentes.
En un congreso se pasan muchas horas sentadas, escuchando, ponencias muy interesantes, pero donde los asistentes solo escuchan.
Una actuación distendida y divertida, que tenga que ver con la temática del congreso, pero que sirva para relajar el ambiente y hacer que recuerden con cariño este congreso, es donde creo que os puedo ayudar.
Imaginar que pasadas unas semanas os escriben asistentes al congreso para daros las gracias por hacer posible un congreso tan interesante y ameno. En lo de interesante no soy ningún experto, pero en lo de ameno, algo sé.
Me presento por si no me recordáis:
Soy Alex Herrán y hago un espectáculo de magia sin tener ni idea de magia. Y aun así funciona. Quizá sea porque creo en la verdadera magia que hace que lo imposible se haga posible.
Este espectáculo se titula ALACASÍN, Comedia mágica familiar. Actualmente programado en los Teatros Luchana.
He aquí mi propuesta para ayudaros a hacer más ameno vuestro Congreso Nacional FECORA.
Para empezar, os hablaré de lo que NO es esta propuesta:
- No es una ponencia que haya que escuchar racionalmente. Más bien, buscaré llegar al corazón de los asistentes, por eso que dicen de “Corazón que no siente, ojos que no ven”.
- Tampoco se trata de un espectáculo de magia realizado por un gran mago. De hecho, lo hago yo, que tengo el nivel de magia de Borras. Aun así, con este espectáculo sorprenderé a los asistentes.
- No sacaréis grandes ideas que vayan a transformar a los asistentes, aunque sí reiréis al ver esas ideas desde la mirada inocente del clown.
Mi misión es conectar con el público y que se emocionen viendo en escena una “ponencia-teatralizada”.
Para eso existen dos caminos.
Dos opciones que debéis elegir.
Yo os las planteo con toda la honestidad posible:
El primer camino consiste en un “Traje a medida”. Es decir, que elaboré una propuesta teatral basada en el lema de vuestro congreso aunando la enseñanza de María Inmaculada. Este camino implica un proceso de investigación y escucha por mi parte. Es decir, me implica invertir lo más valioso que todos tenemos: tiempo. Me baso en mi experiencia para garantizar que sea lo suficientemente atractivo y entretenido.
El otro camino consiste en adaptar la ponencia teatralizada “CREE-A Cuando crees en algo con pasión, acabas creándolo», que realicé para el V Congreso de escuelas Católicas “Sí, Creo”, a vuestro congreso.
Presupuesto:
“Traje a medida”: 1.300 €
Ponencia “CREE-A”: 800 €.
¿Es caro?
No, lo que vais a obtener es mucho más.
Veréis; no compito por precio, sino por calidad.
Cobro por mi experiencia, por mi implicación personal, por mi compromiso en asegurar que el público disfrute y se divierta en el evento que vuestra organización ofrece.
En el caso del “Traje a medida”; Se trataría de un espectáculo hecho a propósito para vuestro congreso. Para hacerlo realidad me va a llevar tiempo, mucho tiempo. Comprarse un traje a medida no es lo mismo que comprarse un traje ya elaborado. Os doy ambas opciones para que tengáis la libertad de elegir la opción que mejor os cuadre.
Bueno, os dejo para que lo podáis valorar con calma. En caso de que no os interese, con que me digáis: “Gracias, pero No” me doy por enterado.
En caso de que “Sí”, necesitaré saberlo lo antes posible para ponerme manos a la creación.
Me despido con Juan Carlos, responsable del Congreso de Escuelas Católicas, quien ya confió en mi trabajo: